La obra de Hartwig se caracterizó por intentar simplificar el juego del ajedrez y llevarlo a una forma minimalista. Su diseño se basaba en la idea de que cada pieza tuviera una forma geométrica y un tamaño específicos para que sus movimientos sobre el tablero fueran más intuitivos y se redujera la complejidad del juego.
El ajedrez Bauhaus de Hartwig es un ejemplo perfecto de la filosofía Bauhaus de simplicidad, funcionalidad y estética innovadora. El juego es una combinación atemporal de arte y diseño y representa una obra maestra del arte moderno de jugar al ajedrez.
LA MODERNIDAD ATEMPORAL
Josef Hartwig
Lo que es imperceptiblemente especial en este juego de ajedrez es su simplicidad. No hay adornos que presten a las piezas individuales una háptica que se aleje radicalmente de lo que hasta ahora ha caracterizado el diseño de las piezas de ajedrez.
La búsqueda de claridad y simplificación a favor del destinatario es por lo tanto evidente en el ajedrez de la Bauhaus como en casi cualquier otro objeto de arte utilitario.
CLÁSICO DE SU GÉNERO
la forma sigue a la función
La forma y la terminación de cada figura están sujetas al dictado de la función. Las figuras armonizan con la superficie de juego, el tablero de ajedrez, ya que no forman un contraste juguetón, sino que se abren paso con fuerza en la simetría.
El ajedrez de taller de la Bauhaus representa una encarnación de la idea de la Bauhaus no sólo por su apariencia. Incluso contiene un mensaje.
Formas minimalistas: torre = cubo, alfil = cruz diagonal, caballo = bloque L
Numerado y acompañado de certificado (edición naef)
Filosofía del diseño
Hartwig redujo cada pieza a su lógica de movimiento: las líneas rectas de la torre se convierten en un cubo; la trayectoria diagonal del alfil, en una cruz tallada; el caballo, en un bloque L. Sin adornos ni figuras, solo geometría pura, fiel al credo Bauhaus «la forma sigue a la función». El resultado es a la vez una icónica pieza de diseño y un manifiesto lúdico contra la simbología bélica del ajedrez tradicional.
Materiales & Dimensiones
Las piezas están hechas a mano en arce macizo y acabadas con una laca satinada que realza la veta de la madera. El tablero plegable funciona como caja, protege las piezas y convierte el conjunto cerrado en un objeto escultórico.
Uso & Exposición
Ya sea en una mesa de centro, una estantería de oficina o un pedestal de museo, este juego siempre genera conversación. Sus formas claras lo hacen ideal para escuelas de diseño, estudios creativos y como regalo refinado para arquitectos o amantes del arte moderno.
FAQ
¿Es una edición autorizada? Sí — naef produce el set con licencia oficial Bauhaus y numera cada caja.
¿Pueden jugar los niños? Por supuesto. Las piezas de arce son robustas; edad recomendada 6+. Las formas abstractas incluso ayudan a los principiantes a visualizar cada movimiento.
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Con la Experiencia Bauhaus, puedes visitar Dessau y ver dónde las ideas, el diseño y el movimiento se unieron.